Clio

Una delicada colcha roja resalta aún más el singular cabecero de madera labrada que dota a esta habitación de una personalidad única. Con ventana a uno de los patios de La Morada.

"Quitar codicia, no añadir dinero,
hace ricos los hombres, Casimiro;
puedes arder en púrpura de tiro,
y no alcanzar descanso verdadero.
Señor te llamas; yo te considero,
cuando el hombre interior, que vives, miro,
esclavo de las ansias y el suspiro,
y de tus propias culpas prisionero..."